16 may.- En el Complejo Arqueológico y Ceremonial de Tiwanaku, por primera vez, se restauran los monumentos líticos con un proyecto que ejecuta un equipo de expertos de la Universidad del Valle de Utah de los Estados Unidos, conjuntamente con arqueólogos bolivianos y que incluye trabajos de limpieza de esculturas y paredes de piedra, la elaboración de mapas digitales y la creación de un manual de protocolos para la conservación del sitio arqueológico, nombrado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco.
La jefa de la Misión de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia, Debra Hevia, dijo en un acto que se realizó en el Museo Cerámico de Tiwanaku que, el proyecto denominado “Restauración de esculturas de piedra y desarrollo de mapas digitales del sitio Patrimonio Mundial Tiwanaku”, es un reflejo de la amistad que une a “nuestros pueblos durante más de 175 años de relaciones diplomáticas y que reafirma el compromiso de trabajar junto al pueblo boliviano para preservar su valioso patrimonio cultural”.

La diplomática afirmó que el desarrollo de la cultura Tiwanaku abarcó unos 1.500 años, por lo que se espera que sea conservado otros 1.500 años más con los estudios y resultados que serán obtenidos a través del proyecto que se inició en 2023 y que culminará en 2026. El proyecto con una inversión de más de cien mil dólares es financiado por Fondo para la Preservación Cultural del Departamento de Estado y fue obtenido por los arqueólogos bolivianos.
El equipo científico conformado por especialistas de la Universidad del Valle de Utah de los Estados Unidos, conjuntamente con los arqueólogos bolivianos, está liderado por Aliki Milioti, experta conservadora y con un doctorado en Arquitectura en Restauración de Monumentos de la Universidad Nacional de Atenas, Grecia.
“En el mundo de la restauración lítica, siempre decimos que cada intervención tiene un riesgo de perder algunas partes de las piezas de valor, sin embargo, la decisión de no intervenir resultaría con la pérdida completa o permanente del monumento, por lo que necesitamos un equilibrio, así lo demuestra la experiencia en Grecia e Italia donde se encuentran esculturas muy antiguas”, aseveró Milioti que durante los últimos 27 años, se especializó en el estudio, la investigación y la restauración de monumentos patrimoniales. Respecto a la existencia de líquenes u organismos que erosionan la roca de los monumentos líticos en Tiwanaku, la experta en conservación sostuvo que, “la naturaleza puede ser más destructiva que cualquier otra intervención de los humanos”.
El proyecto también incluye la construcción de una plataforma virtual para realizar la conservación integral del sitio, donde se obtendrá información de los avances de restauración, de anteriores intervenciones con miles de fotografías y planos del lugar, además con el aporte de las investigaciones científicas. “AIRE LIMPIO”
Otro de los expertos restauradores líticos que forma parte del proyecto es James “Rusty” Brenner que cumple con la limpieza de las piedras y que, según su experiencia, se puede retirar los líquenes y otros elementos adheridos a las superficies de las rocas andesita y arenisca con las que fueron talladas los milenarios monumentos en Tiwanaku.
En relación a la afectación que puede ocasionar los rayos ultravioleta y el cambio climático en las estelas, Brennen reveló que cuando se tiene un área densamente poblada con organismos biológicos “es una indicación que el aire está limpio, porque a los líquenes no les gusta el aire contaminado”.
Anunció que se cuenta con una solución biológica denominada “D2”, además de otros componentes encontrados localmente en Bolivia, por lo que se retirará el liquen de cada una de las piedras del Complejo Arqueológico de Tiwanaku.
El director del Centro de Investigaciones Arqueológicas, Antropológicas y Administración de Tiwanaku (Ciaaat), Gonzalo Choque, destacó el proyecto de conservación de líticos. “Es fundamental el proyecto para poder generar protocolos de conservación de Tiwanaku, tomando en cuenta que no contamos con conservadores académicamente formados en Bolivia”, agregó.
Remarcó que el Ciaaat realizó estudios biológicos anteriores sobre los líquenes, pero que actualmente ya se cuenta con los insumos que se van a utilizar en el trabajo de campo para la eliminación de estos organismos que afectan a todas las rocas talladas (andesitas o areniscas). (Ciencia Bolivia).
/Prensa