15 mar.- Bolivia en los ojos del mundo. Está a punto de inscribir su nombre en el recorrido de una de las competiciones internacionales más intensas, riesgosas y famosas del mundo: el Rally Dakar.
La expectativa crece en el pueblo boliviano luego de la reunión sostenida en Francia entre el Primer Mandatario del país y los representantes de la ASO (Amaury Sport Organisation) —organizadora de la prueba—, que tienen en sus manos la decisión de que la competencia pase o no por Bolivia. Determinación que se conocerá en París el 20 de marzo (21 en Bolivia).
“Es una campaña que la Federación Boliviana de Automovilismo Deportivo (Febad) está gestionando hace más de dos años a solicitud del Primer Mandatario”, dijo a Cambio el presidente de la esta institución, Armin Franulic, quien destacó el interés y compromiso demostrado por el Jefe de Estado boliviano en favor del deporte.
Rally Dakar, Recorridos intensos
El Rally Dakar es una competición anual de rally raid, una disciplina de automovilismo y motociclismo que se disputa en campo abierto durante las primeras semanas de enero de cada año.
Cientos de kilómetros deben recorrer los participantes para avanzar de un pueblo a otro por caminos no delineados y minados de dunas y estepas. Por tanto, una de las claves de este tipo de carreras es la orientación.
Como es de conocimiento general, la organización busca cada año nuevas rutas para brindar a los competidores una nueva experiencia. Bajo este precepto, Bolivia se convierte en una opción interesante porque ofrece paisajes y destinos turísticos impresionantes, como el salar de Uyuni. “La idea es hacer un recorrido distinto cada año. Por las condiciones del rally es importante contar con el apoyo de cada país, es realmente una competencia muy difícil de organizar porque es itinerante”, dijo en más de una ocasión Etienne Lavigne, director de ASO.
Las cuatro categorías participantes son automóviles, camiones, motocicletas y cuatrimotos. El terreno varía considerablemente, se atraviesan zonas de arena, rocas, barro, vegetación y carreteras secundarias. La inscripción en la prueba es abierta, lo cual la convierte en la carrera idónea para amantes de la aventura.
Aunque la inversión que deben hacer los países anfitriones es alta —entre 8 y 10 millones de dólares— el ingreso alcanza hasta los 100 y 120 millones de dólares, afirmó Franulic basado en experiencias de países vecinos como Argentina y Chile.
Las principales marcas de fabricantes de coches y camiones presentan sus nuevos modelos de vehículos modificados para la prueba, en lo que se ha convertido en una competencia de marcas de fabricantes de coches, camiones y motos.
Según Franulic, la carta enviada por la ASO a las autoridades bolivianas en la que expresa su disculpa por no haber tomado en cuenta a Bolivia en la competición de enero de 2013 y su predisposición de incluirla para 2014 o 2015 deja entrever una respuesta favorable. (Cambio)
