Cochabamba, 24 Nov.- La Iglesia de Cochabamba puso a la región del trópico del Chapare como referencia de las declaraciones de monseñor Tito Solari sobre el crecimiento del narcotráfico, a menos de 24 horas de un ultimátum puesto por los productores de coca y alcaldes esa región vinculadas al MAS que exigieron pruebas sobre el micro tráfico de drogas.
El vicario del Arzobispado, monseñor Miguel Manzanera, dijo que la situación del tráfico de drogas es patente y “está a la vista de todos, es imposible tapar el sol con un dedo”. El Chapare es considerado el mayor productor de coca no apta para el acullico según los cocaleros de Yungas.
Manzanera aclaró que monseñor Solari no ha formulado denuncia sino “una preocupación de algo que es evidente que no hace falta ni siquiera que lo dijera monseñor porque todo el mundo lo sabe, basta ver los problemas tan graves que hay en el Chapare, los linchamientos que han habido. Se sabe que las mafias extranjeras están ya metiéndose”.
A tiempo de asegurar que Solari no dijo nada nuevo, mencionó que existen avionetas que van y vienen en el Chapare. Y sobre la participación de algunos menores que venden droga en sobrecitos, el vicario manifestó que es una táctica empleada en muchas partes donde existe el narcotráfico, porque los menores de edad no son imputables según el Código Penal.
El segundo hombre de la Iglesia en Cochabamba, manifestó que monseñor Solari ha recibido comentarios de personas fidedignas e incluso tuvo ocasión de comprobarlo y pidió al gobierno a que en vez de mostrar susceptibilidad, investigue y ponga remedio a esta situación que es una preocupación de los padres de familia, que ve como jóvenes de 14 y 15 años ya comienzan a manejar su plata.
GOBIERNO SUSCEPTIBLE
De acuerdo al análisis de Manzanera, el gobierno muestra una excesiva susceptibilidad que es una cualidad negativa. “Hay personas que no toleran que se les diga nada que le pueda afectar, creo que algo de esto hay en el sentido de que no se acepta ninguna observación”.
Recordó que similar actitud observaron con motivo de la realización de la Asamblea de la Conferencia Episcopal de Bolivia donde se realizaron algunas referencias generales sobre el alza de precios, falta de empleo y personas muy metidas en la droga, y recibieron críticas del gobierno.
“Me da la impresión de que el gobierno toma como si fuera una crítica destructiva, como que esto es la oposición y no es cierto, la Iglesia no tiene como misión organizar ninguna oposición sino decir la verdad”, declaró a los medios de prensa.
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