Llantas, latas, cartones, aguas detenidas, frutas descompuestas y hasta escombros. Todo está debajo del puente.    El Alto, 7 jun.- Todos los días las vendedoras de fruta se quejan del nauseabundo olor que proviene de las aguas estancadas debajo del puente de Río Seco.

Dicen que ese tramo es el acceso diario de los carros basureros que se dirigen al depósito de Villa Ingenio. Los que depositan las toneladas de basura. Cementerio basural que cuando está próximo a colapsar es tapado con tierra de ripio por los encargados de la empresa Trebol.

María Cuevas, vendedora de frutas en el puente Río Seco, dice: “Nosotras venderíamos un poco lejos del puente de Río Seco, tal vez más allá de las paradas incluso. Pero la gente que viene en los minibuses justamente se baja en el puente. Vender más allá del puente sería peligroso, por la velocidad de las movilidades. Por eso estamos sentadas aquí, sabemos que el olor es fuerte, sobre todo cuando solea. Pero ni modo, nos aguantamos con tal de vender nuestros productos. Por aquí mismo pasan los carros basureros y nunca se han molestado en limpiar cerca de este puente, pasan y repasan hasta Villa Ingenio. Vivimos cerca al puente y todos estos olores también nos preocupa que tengan que sentirlo nuestros hijos”.

Los vecinos esperan trabajos notorios por parte de la Alcaldía. Sin embargo, recientemente la casa edil hizo conocer que intenta proseguir sus actividades normales a partir de la segunda semana de junio, luego de un inventario realizado a la documentación oficial con la asistencia de una notaria de fe pública.(cambio)