La Paz, 19 mar.- Fortaleza y belleza Daniela Villarroel Agramont cuenta por qué se volvió pesista, Tiene 21 años y le gusta el gimnasio. Empezó con el atletismo, pero la halterofilia la conquistó. Tiene buena técnica y nada de masculinidad.

No esperaba ganar tantos títulos practicando esta disciplina. “No estaba en mis planes ser pesista, yo practicaba atletismo. Las pesas requieren de mucha fuerza explosiva y potencia, y yo la practicaba como parte complementaria en el entrenamiento del atletismo”. Pero conocer con más profundidad las pesas llamó su atención, éstas la atraparon y ya lleva un año y medio en la halterofilia.

Dice que es un deporte constantemente confundido. “La gente crea muchos estereotipos, hay quienes piensan que los deportistas que levantan pesas son unos ‘monstruos de músculos’ y no es verdad, cada persona tiene un biotipo definido; es decir, si uno es delgado, siempre será delgado, y lo mismo pasa con personas más gruesas”.

El levantamiento de pesas no tiene ningún parecido con el fisicoculturismo.

“Levantar peso no desarrolla musculatura, este deporte tonifica el físico y la musculatura, pero no la desarrolla. Se la confunde con el fisicoculturismo, que es una práctica que se dedica a dar escultura al cuerpo, los fisicoculturistas buscan eliminar completamente la grasa corporal y ganar volumen muscular. El objetivo es ser personas grandes con los músculos bien marcados”.

Falta conocimiento

Daniela Villarroel, al ser una atleta que practica una disciplina poco convencional, constantemente es estigmatizada.

“Todas las personas que se anotician sobre la disciplina que practico, lo primero que hacen es tocarme el brazo para medir cuán fuerte puedo ser. Acá en Bolivia todavía las personas tienen la mente muy cerrada, es por eso que somos contadas las atletas pesistas”.

A todo esto se suma el poco incentivo y falta de información para que la juventud practique este deporte. “La gente cree que al ser pesista no desarrollarán completamente su crecimiento o que van a distorsionar su físico, ésta es una mentalidad antigua y muy cerrada.

Los éxitos y halagos

El mes anterior compitió en un torneo internacional en Chile y observó las condiciones de entrenamiento de esta disciplina fuera del país. “Allá pude ver atletas que practican la halterofilia desde los ocho años, gente que se está formando porcentualmente en relación a su edad y a su fuerza. Si bien no levantan grandes cantidades de peso, desarrollan la técnica. Además, el equipamiento en Bolivia no es el adecuado, incluso no tenemos entrenadores preparados en una escuela. Sólo tenemos a Gerardo Cortez, que es el único atleta capacitado para desarrollar esta disciplina”.

La halterofilia en mujeres no está todavía bien posicionada, “hay personas que creen que por el hecho de ser mujeres no podemos hacerlo correctamente y que es un deporte netamente masculino, es así que los varones reciben más apoyo y mejores condiciones. Paradójicamente, en el gimnasio se observa a más mujeres”.

Nada de masculinidad

Muchas veces, las pesistas son catalogadas como masculinas y que han perdido su lado femenino, pero Daniela Villarroel demuestra lo contrario. Además, es simpática y tiene una silueta envidiable.

“En el gimnasio me concentraba en el deporte, pero fuera de él soy una chica de tacos, con accesorios, adornos femeninos, ropa entallada y nunca mostré una actitud varonil o prepotente”.

Al momento de buscar una pareja reconoce que las cosas se complican un poco para una pesista. Comenta que hay hombres que se sienten intimidados y con el ego lastimado al tener como pareja a una mujer igual o más fuerte que ellos. Pero para Daniela Villarroel el tema del amor va más allá de lo físico. “Es cuestión de química y de cuánto conoces a tu pareja, no importa el físico; como toda mujer, busco una persona que me complemente y que me dé seguridad. Hay muchos chicos, especialmente en los gimnasios, que tienen muchos atributos físicos, sin embargo no pueden mantener una conversación activa”.

Actualmente, Daniela Villarroel no tiene pareja, pero considera un factor importante que su pareja pueda comprender y aceptar su disciplina, “quieras o no, es más fácil congeniar con una persona que esté dentro de tu ambiente, surgen más temas en común, estar con otro deportista es bastante interesante porque comprenden mejor el estilo de vida y la concentración que se debe tener”.

Daniela Villarroel Agramont

Daniela Villarroel: La universitaria

Daniela Villarroel nació el 26 de junio de 1990 y estudia Ingeniería Comercial en la Universidad Los Andes.

Esta etapa de la vida de la atleta de 21 años la dedica a concentrarse en el deporte y en sus estudios, además de ser campeona de levantamiento de pesas y entrenar tres horas diarias. Se prepara para ser ingeniera comercial. “Aún no se me ha dado la oportunidad de encontrar a alguien que se acomode a mi ritmo de vida, estoy sola pero tranquila, aunque no he cerrado mis expectativas de conocer a alguien”.

Daniela Villarroel es dos veces campeona juvenil, tiene cuatro récords departamentales, obtuvo el reconocimiento de Atleta Destacada de 2011. Su mayor logro es la medalla de oro que ganó en el Torneo Internacional de Levantamiento de pesas en Iquique, Chile. Este año, participará en la categoría mayores. Entre sus objetivos está llegar a los Juegos Odesur de Chile 2014.

Explica en qué consiste la halterofilia

Halterofilia, muchos desconocen el significado y pocos lo practican en el país. Daniela Villarroel cuenta que no es la primera vez que debe explicar con detalle sobre las características de la disciplina.

“Se trata del levantamiento de pesas, es una disciplina que requiere de mucha habilidad, técnica, concentración y disciplina debido al trabajo con peso. Hay dos modalidades, arranque y envión. El arranque consiste en levantar el peso desde el piso hasta alcanzar la total extensión de los brazos, en tanto que el envión tiene dos tiempos, en el primero se levanta el peso hasta la altura de los hombros, para realizar el posterior bote y extender completamente los brazos”.

Por Mariela Ortiz / Cambio