La Paz, 22 Mar. (NAN).- La Central Obrera Boliviana (COB) perdió credibilidad en sus propias bases reflejada en el debilitado paro de 48 horas a nivel nacional que no tuvo el mismo impacto de otros tiempos, coincidieron analistas y asambleístas que observan que el ente sindical empezó a pagar facturas políticas por haber expresado su apoyo militante al presidente Evo Morales. La COB evaluará este miércoles la huelga que organizó.
El analista Carlos Cordero dijo que la COB atraviesa por una crisis interna porque no logra movilizar a todos sus afiliados y esa situación es consecuencia de decisiones que ha tomado en el pasado de subordinarse al gobierno y recordó que en ocasiones anteriores se vio cómo la alta dirigencia sindical promulgó leyes junto al presidente Morales en la sede sindical.
Explicó que hace tiempo atrás se vio el potenciamiento de los grupos sindicales campesinos rurales y agrarios que opacó la fortaleza de la COB, porque la movilización de dos días fue salvada por la masiva presencia de universitarios de distintos lugares del país, planteando su rechazo a las políticas gubernamentales.
“Aquella organización sindical que lograba paralizar al país y ponía en jaque o en una situación incómoda a todos los gobiernos, hoy día ha perdido la capacidad de movilización y las causas son conocidas”, manifestó Cordero al señalar que el poder de la COB se trasladó a las organizaciones campesinas que están bajo control del partido de gobierno.
Por su lado, la diputada Norma Piérola manifestó que la actual COB no garantiza una defensa de los trabajadores porque cualquier rato se alineará a la voz de mando de Palacio de Gobierno como lo hizo el año pasado cuando todo el tiempo estuvo reunido para expresar apoyo a las leyes que envía el Ejecutivo a la Asamblea.
Lamentó la pérdida de fuerza de convocatoria y recomendó bajar a las bases que realmente exigen una representación genuina para lograr que el aumento salarial sea superior al 10 por ciento, además de otras reivindicaciones sectoriales porque los maestros y trabajadores en salud no están solamente de acuerdo con ese monto.
El viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, César Navarro, sostuvo que el paro genera efectos negativos para la misma Central Obrera Boliviana porque las movilizaciones no surtieron ningún efecto, afectándose sobre todo a la credibilidad y demostrando, además, que esa organización se está debilitando, abriendo espacios para que sectores de derecha ganen terreno en esa prestigiosa institución.
AMPLIADO ESTE MIÉRCOLES
Entre tanto, el ejecutivo de la COB, Pedro Montes, no se animó a realizar una evaluación concreta del alcance del paro de 48 horas y prefirió dejar esa tarea al ampliado de trabajadores que se realizará este miércoles, sin descartar medidas de presión más radicales tomando en cuenta que el gobierno, a través del Ministro de Hacienda, Luis Arce, rechazó la solicitud de subir el porcentaje de aumento salarial.
Montes insistió, sin embargo, en hablar directamente con el presidente Evo Morales para tratar las demandas de la COB porque dialogar con los ministros de área no significa tener garantías y la muestra es que hasta ahora las cuatro mesas de diálogo ni siquiera han concluido su trabajo.
//cc
