Budapest, Hungría, 22 Abr.- Eduardo Rozsa Flores, un boliviano que tenía también las nacionalidades húngara y croata y que murió la semana pasada en un operativo antiterrorista en la capital cruceña, afirmó en una entrevista grabada en el 2008 y transmitida el martes en Hungría, que deseaba volver a su país natal para ayudar a la formación de una milicia en procura de la independencia de Santa Cruz.
Eduardo Rozsa Flores fue uno de los tres muertos en lo que según las autoridades bolivianas fue un tiroteo en un hotel de la ciudad oriental de Santa Cruz. Las autoridades bolivianas afirman que el grupo, el cual incluía a dos sujetos capturados por la policía, planeaba asesinar al presidente Evo Morales.
“He sido llamado para organizar la defensa de la ciudad y de la provincia de Santa Cruz”, dijo Rozsa Flores en una entrevista con el periodista húngaro Andras Kepes, grabada el 8 de septiembre del 2008 pero transmitida por primera vez el martes por la televisión estatal. "No me estoy yendo a la jungla boliviana para jugar al Che Guevara".
Rozsa Flores dijo, según la agencia AP, que un traficante lo llevaría de Brasil a Bolivia, donde comenzaría a organizar una milicia, con base en la decisión de una asamblea de la provincia de Santa Cruz.
“Hay un contexto legal” en la misión, aseguró Rozsa Flores en la entrevista. “No voy allá para atacar La Paz, ni para ayudar a la organización de un ataque contra la capital o para derrocar al presidente…. Debe organizarse la defensa, la resistencia”.
Rozsa Flores dijo que la milicia esperaba obtener las armas mediante canales clandestinos tanto dentro de Bolivia como en el extranjero, y que su objetivo sería dar una “demostración de fuerza”.
Los milicianos “no marcharán con banderas ni palos, sino con armas de fuego”, señaló, y dijo que el grupo quería demostrar que si no se concedía una mayor autonomía a Santa Cruz, la provincia estaba dispuesta a separarse del resto de Bolivia.
“Entonces declararemos la independencia y crearemos un nuevo país”, advirtió Rozsa Flores, quien tenía además la ciudadanía croata y peleó por Croacia contra los rebeldes serbios en la guerra de 1991 que fue parte de la fragmentación de la antigua Yugoslavia.
De acuerdo con los mensajes de correo electrónico recibidos por Kepes, Rozsa Flores llegó a Bolivia el 4 de octubre. Le pidió a Kepes no difundir la entrevista secreta sino hasta que regresara de Bolivia o muriera.
Kepes dijo que la entrevista podría considerarse la “última voluntad” de Rozsa Flores.
(Fuente:Erbol)